El verdadero cambio interior se produce cuando descubrimos que hemos sido creados por y para Dios; y, vivimos para agradar a nuestro creador, para ADORAR a Dios. Diferenciemos lo que es Adorar y Alabar: ADORAR, es amar a Dios sobre todas las cosas, esto debe producir un cambio profundo en nuestras vidas que deben hacerse visibles en nuestras decisiones, esto implica que debe existir sinceridad en nuestros corazones.- ALABAR.- Es la manifestación espiritual de la alegría del corazón cristiano, en cada persona existe una forma diferente de manifestarse, ésta tiene una exigencia, debe ser autentica, sin autenticidad la alabanza se transforma en mentira. Una vez establecido lo que es adorar y alabar, establezcamos como podemos permanecer agradando a Dios.
Lección 1.- La adoración nace de nuestra libertad.- todas y cada una de nuestras actividades diarias de nuestra vida debemos vivirlas en culto a Dios, es decir, todo lo que realicemos cada día debe ser para honrar y glorificar de Dios, sin dejar que los pensamientos no cristianos nos distraigan de vivir en la presencia de Dios.
Lección 2.- La adoración es adoración practica.- La adoración práctica es seguir a Cristo con todas las consecuencias, esto no implica caer en el fanatismo, sino que tu vida sea una ofrenda viva sometida a la voluntad de Dios, para ello debes en oración buscar su voluntad, llevando nuestras imperfecciones a los pies de la cruz y ser libre para: adorar, agradar, no hacer las cosas a medias, vivir en excelencia, alrededor de nuestra espiritualidad y librándonos de nuestra mediocridad espiritual.
Lección 3.- Adorar significa cambiar nuestra manera de pensar.- Pablo en Romanos 12:2; nos dice: “ No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta”.; es decir, que nuestros pensamientos sean transformados conforma a la voluntad de Dios.
Lección 4.- Adorar es hacer lo que Jesús hacía.- Si hemos aceptado y reconocido a Jesús como nuestro salvador personal, que es el camino la verdad y la vida, nuestro maestro, significa que como sus discípulos y seguidores, en continua oración debemos buscar su voluntad y seguir su ejemplo, renunciando a nuestras aspiraciones terrenales, prestando atención a lo que Dios quiere para nosotros.
CONCLUSIÓN.- Hoy, después del camino recorrido, la ilusión de muchos ha dado paso a la frustración. Hay un sentir generalizado de insatisfacción. El frío del desencanto se ha apoderado de un buen número de personas. Muchos han entrado ya en la vía muerta del cinismo. Es el viaje a ninguna parte. Y es que el verdadero cambio todavía no ha llegado. Es el que tiene que ver con la disposición interior del individuo, hacia sí mismo y hacia los demás. Y mientras este cambio no se produzca, todo lo demás no tendrá más que un efecto epidérmico, superficial y pasajero. Aquí es donde el Evangelio ofrece una alternativa de cambio válida a quienes sin prejuicios se abren a su mensaje. Es la alternativa de la fe en Jesucristo. Jesús es el mayor factor de cambio que el mundo jamás haya conocido. Su palabra es portadora de luz, vida y libertad. Sus enemigos dijeron de él en Juan 7:46 "Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre", Jesús rompe los moldes. Su mensaje es radical, transformador. Afirma ser " el camino, y la verdad, y la vida." Es el camino del amor y la reconciliación. Es la verdad que llena el corazón. Es la vida que colma de esperanza.